viernes, 19 de junio de 2009

El primer libro de Yang Chengfu

Han culminado varios años de trabajo con la publicación de Métodos de Aplicación del Taijiquan (Taijiquan shiyongfa). Esta es la primera versión en castellano de la parte medular del primer libro sobre taijiquan que lleva la firma de Yang Chengfu, publicado en 1931. Está ilustrado con la serie de fotos de Yang Chengfu incluidas en ese libro suyo y, además, los dibujos basados en esas fotos que ilustran posiciones intermedias, obra de Zhou Yuanlong de fecha indeterminada pero probablemente no muy distante en el tiempo del libro de Yang Chengfu. Esta versión incluye el núcleo de los textos que Yang Chengfu añadió a la sección específicamente dedicada a las aplicaciones.


Es importante destacar que éste no es el primer libro que explica en detalle e ilustra gráficamente cómo se practica el taijiquan. Hubo dos libros anteriores sobre el estilo de la familia Yang, uno escrito en 1921 por Xu Yusheng [Longhou], discípulo no sólo de Yang Chengfu sino también, antes, de su padre Yang Jianhou, y otro escrito en 1925 por Chen Weiming, distinguido estudiante de Yang Chengfu. Éste último fue escrito a pedido del propio Chengfu, y en gran medida recoge las instrucciones verbales del maestro. El editor de Taijiquan shiyongfa fue Dong Yingjie [Tung Ying-chieh, 1898-1961], otro destacado estudiante de Yang Chengfu.

Taijiquan shiyongfa tiene una característica que lo hace muy especial: Yang Chengfu explica cada movimiento en función de sus aplicaciones marciales. Prácticamente cada una de sus explicaciones comienza con la fórmula: ‘Desde la postura anterior, supón que un adversario...’ Esto destruye por completo el mito tan difundido de que Yang Chengfu diluyó el aspecto marcial del arte para que le resultara más atrayente a quienes solamente querían practicarla como disciplina para promover la salud. Su alumno Chen Weiming, en Taijiquan dawen (1929), libro que según él refleja lo que había oído de su maestro, confirma esto cuando dice: ‘El taijiquan procura la calma en el movimiento y puede contribuir en gran medida a la meditación. Mucha gente ve al taijiquan como un arte marcial e ignora este aspecto.’ En otras palabras, la preocupación en aquellos tiempos parece haber sido todo lo contrario de lo que sostienen en la actualidad quienes se empeñan en ‘redescubrir’ presuntas variantes marciales del estilo Yang.

Las fotos que acompañan el texto son las mismas que aparecen en el libro original, pero realzadas digitalmente por Eduardo Crawley para un trabajo anterior: El maestro en acción: Yang Chengfu y el Clásico de Chang Sanfeng comentado por Yang Luchan (1999). Los dibujos de los movimientos intermedios son de Zhou Yuanlong (1927-97), eximio ilustrador (y maestro) de artes marciales.

El libro puede adquirirse por internet directamente de la editorial, en http://www.lulu.com/


1 comentario:

José Antonio dijo...

Eduardo, gracias por tu e-mail informándome sobre este libro. Seguiré tu blog atentamente. Recibe un abrazo y, permíteme que lo anuncie en mi blog para que mis lectores lo conozcan.

Un fuerte abrazo.