miércoles, 10 de diciembre de 2008

Preguntas y respuestas sobre taijiquan (7)

CHEN WEIMING DEMUESTRA PENG, LU Y AN
Fotos de 1925




Continuamos con los extractos del libro de Chen Weiming
Taijiquan da wen
(‘Preguntas y respuestas sobre taijiquan’).
Para las entregas anteriores, ver el archivo.



Aplicaciones marciales

Por favor, describa las aplicaciones de Asir la Cola del Pájaro, Látigo, Las Manos Rasguean el Laúd, Retraerse y Empujar, Gallo Dorado se Posa Sobre Una Pata, Ascender a las Siete Estrellas, y Retroceder Montando al Tigre.

Asir la Cola del Pájaro:
Si mi adversario golpea con su puño derecho, uso mi brazo derecho en Rebote [peng] para adherirme a él. Si entonces golpea con su puño izquierdo, me adhiero a él con mi brazo izquierdo y uso mi brazo derecho para Retraer [lu]. Entonces, si retrocede, puedo usar Presión [ji] o Empujar [an] según la situación.

Látigo:
Se usa para frustrar ataques a izquierda o derecha, pero también puede usarse para atacar con la palma. El ‘gancho’ de tu mano derecha se usa como una especie de ‘energía rolante’: todas las partes — dedos, nudillos y muñeca — se articulan rotando hacia abajo como una rueda.

Las Manos Rasguean el Laúd:
Cuando mi adversario golpea derecho hacia adelante con su puño derecho, poso mi mano derecha sobre el interior de su muñeca derecha y, a la vez, mi mano izquierda sobre el exterior de su codo derecho, mientras giro la cintura hacia la derecha. Con una energía de quiebre, mis palmas van en direcciones opuestas y, si el jin es correcto, esta técnica le quebrará el brazo.

Retraerse y Empujar [1] :
Cuando uso mi puño derecho y mi adversario responde con su mano izquierda, empujando mi codo hacia mi lado izquierdo, yo enrosco mi mano izquierda desde abajo de mi codo, trabando su muñeca izquierda. Acompañando su energía de Empuje [an] hacia su costado derecho, mi mano derecha se posa sobre su codo izquierdo y uso mi Empuje [an] para despedirlo con ambas manos.
Gallo Dorado se Posa Sobre Una Pata:
Si mi adversario se acerca demasiado puedo usar la palma o el puño para atacar su mentón, y la rodilla para atacar su abdomen.

Ascender a las Siete Estrellas:
Si mi adversario descarga un poderoso golpe descendiente hacia mi cara, puedo usar mis puños cruzados para bloquear y mi pie derecho para patear sus partes inferiores.

Retroceder Montando al Tigre:
Si mi adversario es fuerte y soporta este ataque, y también da un paso adelante, yo doy un paso atrás y separo mi mano, desviando a un lado su puño y a la vez pateando con mi pie.

Estas aplicaciones son muy generales, y dado que ningún adversario te atacará según un patrón predeterminado, debes adaptarte a las circunstancias. Si quieres ser capaz de adaptarte a las circunstancias debes practicar el juego de manos y cultivar tu sensibilidad. Aún si tus manos y ojos son rápidos, hay momentos en que tu coordinación no es perfecta, y debes basar tu cotejo libre en el juego de manos. Por más tácticas que recuerdes, el otro podría recordar más: no puedes adaptarte a todas las escuelas. Lo mejor es que mantengas presente una palabra del taijiquan, zhan [pegarse o adherirse], porque todo deriva de esto. Los Clásicos lo plantean así: ‘Mi adversario no me conoce, pero yo lo conozco a él. Como resultado, uno se convierte en artista marcial sin par.’

Esto es así porque el juego de manos es la práctica de conocer a otros. Otras escuelas tienen excelentes técnicas de manos, pero no tienen el juego de manos y por lo tanto deben depender por completo de la rapidez de sus manos y ojos. Pero cuando te adhieres a un adversario él no sabe de dónde proviene la fuerza, ni distingue si es corta o larga. Sunzi escribió que debes conocer a otros y a tí mismo, y así, aunque combatas cien veces con alguien, nunca serás derrotado.

¿Qué pasa si, al adherirte a un adversario, éste decide patearte?

Vale el mismo principio. Para usar su pierna debe mover su cuerpo, y yo siento esto y lo anticipo, jalando su brazo hacia abajo y desequilibrándolo: o bien no puede levantar su pierna o debe dejarla caer. O, justo cuando alza su pierna, yo doy un paso entre sus dos piernas y empujo. De manera parecida, si él intenta ‘barrerme’ con su pie, yo doy un paso adelante y lo empujo. Sobre ambas piernas a veces él es inestable; sobre una sola, aún más inestable. Al adherirme, aprovecho la ventaja de ese desequilibrio.



[1] Esta designación ilustra mejor la secuencia que el nombre tradicional de Como Sellando, Como Cerrando.

viernes, 5 de diciembre de 2008

Preguntas y respuestas sobre taijiquan (6)


Continuamos con los extractos del libro de Chen Weiming
Taijiquan da wen
(‘Preguntas y respuestas sobre taijiquan’).
Para las entregas anteriores, ver el archivo.


Técnicas de cotejo libre (san shou)

¿Cómo se practica el cotejo libre del taijiquan?

El taijiquan tiene más de setenta secuencias, todas aplicables al cotejo libre [1]. Pero si todas sirven para el cotejo libre ¿por qué debemos aprender el juego de manos? Porque el cotejo libre del taijiquan debe nutrirse de la ‘energía auditiva’ del juego de manos. Sólo cuando tienes esa energía [habilidad] puedes practicar correctamente el cotejo libre. Si no puedes adherirte al adversario no adquirirás la ‘energía auditiva’ [ting jin] y tu cotejo libre no será más que las técnicas de bloqueo y desconexión propias de las disciplinas externas. Por esa vía, todos los movimientos serán incorrectos.

Dicen los Clásicos: ‘A partir de la familiarización con el tacto correcto uno va aprehendiendo gradualmente el jin; a partir de la aprehensión del jin uno puede acceder a la sabiduría.’ De esto puedes colegir que la familiarización con el tacto es el primer nivel. La ‘energía auditiva’ es el segundo nivel. La familiarización con el tacto no es en sí algo formidable; mucho más difícil es aprender a ‘oír’.

Por ejemplo, cuando alguien te ataca con el puño, si no puedes adherirte a él no podrás ‘oír’ su fuerza. Si no puedes ‘oír’ la fuerza no puedes acompañarla en dirección alguna, y por lo tanto no puedes practicar el cotejo libre. Si puedes adherirte, puedes acompañar, y si el brazo de tu adversario sube, puedes usar tu otra mano para golpear su pecho. Si su brazo baja, puedes acompañarlo y usar la otra mano para golpear su cara.

Si sus manos avanzan y su energía está del lado izquierdo, lo acompañas y lo neutralizas hacia la izquierda. Luego separas tus manos, usando una para acompañar y la otra para golpear su cabeza. Si su energía está del lado derecho lo acompañas hacia la derecha, neutralizas, y usas tu mano izquierda para golpear su cabeza o su hombro. Si retrae su puño, acompáñalo hacia adelante y descarga energía.

Éstas son sólo indicaciones generales. Resumiendo, el cotejo libre del taijiquan difiere de las otras artes marciales porque se basa en la adherencia y el ‘escuchar’, en tanto que el cotejo libre de otras artes marciales carece de estas sensibilidades. Si los contrincantes están a demasiada distancia uno del otro, son incapaces de alcanzarse, pero cuando están demasiado próximos se agarran uno del otro, y el más fuerte gana.

En el libro de Xu Yusheng Taijiquan shi tujie (‘Manual ilustrado de taijiquan’) [2] él describe una aplicación para cada secuencia. Una vez le pregunté al maestro Yang [Chengfu]: ‘Supón que tuvieras una función de cotejo libre para cada secuencia del taijiquan ¿sería esto la perfección?’ Él me contestó: ‘En el cotejo libre no hay secuencias fijas: todo depende de las circunstancias. Si conoces la ‘energía auditiva’ conoces bien las aplicaciones, pero si no conoces el ting jin, aunque conozcas mil técnicas no podrás usarlas. Por ese motivo omití de mi primer libro las aplicaciones del cotejo libre. Sunzi [Sun Tzu] dice que para conocer a otros debes conocerte a ti mismo, y que aún cuando empieces a moverte después que el otro puedes llegar antes. Si me adhiero al adversario y él no se mueve, yo tampoco me muevo; si se mueve un poco, yo me muevo primero y él resultará despedido. Si uno no tiene buen ting jin no debe combatir.’

Supón que te enfrentas a un practicante de otro arte marcial cuyas manos y pies son tan rápidos que no puedes adherirte. ¿Qué puedes hacer?

Otras artes marciales mantienen cierta distancia al combatir. Ahora bien, si la distancia es excesiva, el otro no será capaz de alcanzarme. Si quiere golpearme la distancia entre ambos debe ser tan corta como para que los brazos y las piernas entren en contacto. Cuando él acorta la distancia, puedes adherirte y usar la ‘energía auditiva’. Entonces, si él es rápido, tu eres rápido; si él es lento, tu eres lento. En una instancia tal, no puedes tener miedo. Simplemente te adhieres: no hay peligro. Sólo si tu no tienes ‘energía auditiva’ tendrá él la ventaja.

¿Pero si la ‘energía auditiva’ del adversario es igual a la propia, puede uno usar las técnicas de cotejo libre?

Serían difíciles de aplicar. Ello, porque ambos son capaces de ‘oír’ ninguna se desconectará. Si uno se separa y usa eficazmente las técnicas de cotejo libre, quiere decir que su pericia es superior. Un buen practicante de taijiquan se adherirá al adversario y le impedirá usar la mano libre [3]. Por lo tanto, adherirse con las manos es vital: no lo descuides.

[1] Algunos traducen san shou como ‘manos que dispersan’, usando una de las acepciones verbales del carácter san. Más apropiado es el uso de las acepciones adjetivales: libre, relajado, no reglado. Así como he traducido tui shou y su precursor, da shou, como ‘juego de manos’, he preferido traducir san shou como ‘cotejo libre’, teniendo en cuenta que Yang Chengfu decía que ‘mano’ en este contexto era figurativo, y en todos estos ejercicios entra a jugar todo el cuerpo.
[2] Este es el primero de los libros instructivos sobre el arte escritos por un alumno de Yang Chengfu a pedido de éste. Fue publicado en 1921.
[3] Esto no es más de un juego de palabras con las acepciones de san shou.